miércoles, 12 de septiembre de 2018

Columna de Opinión




CINE PERUANO PARA TODOS





“Películas peruanas” fue la temática de esta semana en Cine como Cancha y hubieron muchas sorpresas, análisis y comentarios dentro del microprograma televisivo que pueden visualizar en nuestras distintas redes sociales como Facebook o Youtube.  
Junto a mi compañera, Paola Luque Talavera, elaboramos una lista o un conocido “top five (5)” de las mejores películas peruanas. Pero no todo quedó ahí, pues teníamos un bonus y sin contar que el tiempo nos quedó corto pues teníamos más películas de que hablar.
Los 5 mejores “films” que elegimos fueron:


-  Posición 5: “Django” (2002)
 -  Posición 4: “Calichin” (2016)
           - Posición 3: “Locos de amor” (2016)
 - Posición 2: “A los 40” (2014)
  - Posición 1: “Asu Mare” (2013)




La elección fue complicada debido a la masiva cantidad de producción de películas peruanas que han emergido en la última década. La mayoría ha sido producción de Tondero Films que consiguió una gran fama tras su primera gran película que fue “Asu Mare”.
Estas películas tienen como tendencia presentar una historia que le puede suceder o le sucede a muchos.




 Django nos cuenta la impresionante historia de uno de los más grandes delincuentes de nuestra historia. Sus travesías, problemas, alegrías y tristezas son plasmadas en un recuento corto de la gran “trayectoria delincuencial” del popular “Django”. Junto a su incondicional esposa y a “la chica dinamita” oculta sus aventuras y la manera en la que vivía. Como toda gran película tiene una secuencia, esta no fue la excepción. Después de “Django, la otra cara” salió “Django, sangre de mi sangre” y también fue un boom. Personalmente, creo que la historia del hijo no supera la del padre.



Calichin es la historia de un muchacho que llega a ser futbolista de casualidad, pero que era muy bueno haciéndolo. Lastimosamente, el villano de esta historia fue la “tradición peruana” que ha quebrado a muchos futbolistas. El alcohol y las mujeres son parte del fracaso de un futbolista que me recordó mucho a lo que fue Reimond Manco. Un “tocado por Dios” para el fútbol que supo lucirse en un mundial sub 17 con la selección e incluso ser elegido mejor jugador del torneo por delante de la estrella colombiana James Rodriguez.



Locos de amor es el primer musical de Tondero Films y la primera película de esta productora sin su gran estrella Carlos Alcántara. Es considerado el mejor musical peruano llevado al cine y no es para menos con tantos actores nacionales consagrados y dando lo mejor de sí en este musical que me dejo la imagen marcada de la historia de Gonzalo Torres y su pareja.



 Conmoviéndome mucho la escena de este actor cantando con su mujer la canción de Marco Antonio Solís, “Si no te hubieras ido”.
¿Les ha pasado que intentan hacer un reencuentro con su promoción de colegio y casi nunca lo logran? Pues, 8 cuarentones sí lo lograron y dieron inicio a una película espectacular. Drama y comedia de inicio a fin. Imperdible la escena de Carlos Alcantara cuando es sucumbido bajo el efecto de los “happy brownies” de su hijo y su conversación con una llama. Jajaja.



Asu Mare 1 y 2. La historia de amor que muchos quisieran tener, pero que pocos, y en especial Carlos Alcántara ha conseguido en su vida.  Todo nace de un monólogo que realiza el popular “Machín Alberto” y que es plasmado en la primera versión. Desde su travesía con su mamá y con su pareja, quien es caracterizada por Emilia Drago, hasta la aparición de sus grandes amigos de Pataclaun (1997-1999) y la presencia del Dragón emocionaron a muchos.



Muchos dicen que en la 2, Christian Meier opaca al protagonista, pero creo que la 2 es un espejo de lo que fue la 1 y sin duda se coloca como una de las mejores películas del cine peruano.
Hemos repasado, tan solo 5 de las muchas películas peruanas que hay y son muy buenas. Caiga quien caiga, La última noticia, La boca del Lobo, Chicha tu madre y La hora final. Solo por mencionar algunas. El cine peruano esta en desarrollo y solo los peruanos podemos consagrarlo. Nos reencontramos la otra semana. Chau.



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